¡Hola!
Siento por la palabra fea, fea, fea, que pone en el título, pero es que me estoy medio muriendo de frío...
Os voy a escribir (no hablar) de lo que he pensado de mi nueva clase, y que es un cambio radical, y las lecciones que saco de esto.
1- La nueva clase fue todo lo contrario a mi clase de toda la vida.
2- No todos son tan inteligentes como pensé.
3- Personas que me caían bien, ahora mismo están casi que en mi lista negra, porque han cambiado mucho, eso no me gusta.
4- No confiaré en nadie más que en mí.
5- Odié los proyectos.
6- Aprendí a:
-Creer en mí.
- ¿Te caigo mal, y hablas mal de mi? Pues te voy a fastidiar toda tu vida o___O
- Las apariencias engañan.
- No me haré nunca más la buena con NADIE.
Yeah! He sido una chica muy mala, y me alegro... De esta evaluación, me queda claro que la gente no es lo que aparenta ser en las fotos, y que una siempre se siente mejor con gente de su mismo entorno. A parte de muchas cosas malas, y 4 o 5 personitas a las que me gusta fastidiar (por joder un poco), también he podido saber que en esta clase, la gente se preocupa más por ti que en la otra. Que son, muchos de ellos buenos compañeros, y son justos. Pude conocer a 3 o 5 personas que me han caído genial, y que tenían muchas cosas en común conmigo.
Y ahora pensáis... ¿Y esta, a que viene a escribir esto?
Estamos muy de acuerdo contigo en que una siempre se siente mucho mejor con personas de su mismo entorno.
ResponderEliminarPues las notas... ya no han ido tan bien como siempre T.T A una nos han caído 2 (la primera vez en mi vida), aunque las demás de 7 para arriba. Y a la otra un poco peor :s
Se nota haber pasado a 2º de Bachiller, todo se ha complicado mucho, por la selectividad suponemos.
Por cierto, ¿tú a qué curso vas? Nos alegramos de que te hayan ido bien ^-^
Besicos.
Tenéis suerte de ser dos!
EliminarA mi no me ha caído ninguna, además, no se como he llegado a hacer una apuesta con un niño super ootado de mi clase, de quién sacaba mejores notas en la segunda evaluación, pero... Me esforzaré lo más posible, ja ja.
Yo aún sigo en 4º de la ESO, algunas veces me impresiona la cabeza que tengo y la suerte que tengo de que no me haya tocado aún la edad del pavo.
Besicossss!!